La nueva frontera en el descubrimiento y disfrute de la música
La IA está revolucionando la forma en que descubrimos y disfrutamos la música, fusionando géneros y derribando barreras como nunca antes. Los servicios de música impulsados por IA pueden seleccionar listas de reproducción e incluso crear música nueva que refleje nuestros gustos eclécticos, integrando a la perfección música clásica y nueva con géneros populares, lo que nos permite descubrir piezas que tal vez nunca hubiéramos descubierto por nuestra cuenta. Este salto tecnológico ofrece una ventana única a nuestra psique musical, que muestra no solo lo que escuchamos, sino también cómo escuchamos y organizamos nuestra música y ofrece una selección más amplia de la que podríamos haber elegido por nuestra cuenta.
No hay nada más revelador que compartir las listas de reproducción de los colegas. Un artista que conozco tiene listas de reproducción para caminar, hacer ejercicio en el gimnasio, ir de compras y conducir. Cada lista de reproducción presenta una mezcla ecléctica de estilos, desde jazz y ambient hasta reggae, melodías de espectáculos y rock. Curiosamente, ni una sola pieza de música clásica o nueva aparecía en ninguna de estas colecciones. En cambio, el músico tenía una biblioteca separada para estas obras, meticulosamente categorizadas por período de tiempo, género y compositor. Sin embargo, dentro de estas secciones, no había un ordenamiento adicional de las piezas más allá de su ubicación histórica, lo que hacía que pareciera un audiolibro de una clase de estudio de historia de la música. A diferencia del eclecticismo creativo de las listas de reproducción utilitarias, la música "seria" estaba reservada para la escucha "seria", aislándola categóricamente y negando la individualidad de cada pieza. Era como si se hubiera erigido un muro de Berlín entre la música profesional y la personal.
¿Por qué algunos de nosotros sentimos la necesidad de separar la música que consideramos seria? ¿Debemos encerrarla en una jaula dorada? ¿No se puede escuchar la música que escribimos y tocamos junto con las melodías que disfrutamos fuera de la sala de conciertos? ¿La mezcla de estos géneros disminuye su importancia para nosotros o tenemos miedo de que así sea?
Personalmente, me parece que escuchar todo tipo de música en diversas situaciones es una experiencia enriquecedora y placentera. Una de las mejores características de mi servicio de streaming de música es el modo aleatorio, que reproduce selecciones aleatorias de toda mi biblioteca. En una hora, puedo escuchar de todo, desde Beethoven hasta Xenakis, lecciones de español, obras de mis alumnos e incluso mis propias composiciones. Este orden aleatorio a menudo me lleva a escuchar de manera diferente piezas que conozco desde hace décadas, simplemente por el nuevo contexto en el que se encuentran.
La reproducción aleatoria no es una tecnología nueva. Hace años, mi marido puso nuestro viejo reproductor de 5 CD en modo aleatorio para que nuestra hija los escuchara durante todo el día. Incluso amplió esta idea a las actuaciones en directo cuando Common Sense produjo un espectáculo en el que el orden del programa se determinaba mediante la reproducción aleatoria de las piezas antes de cada presentación. Inspirada por esto, la compositora e intérprete Pamela Z llevó el concepto más allá al conectar un reproductor de 300 CD a un reproductor de 400 CD, creando una reproducción aleatoria que mezclaba las pistas de los 700 CD entre sí.
Cada una de estas situaciones de reproducción aleatoria tenía ciertos límites, lo que permitía al programador incluir solo pistas seleccionadas. Sin embargo, el iPod original introdujo un modo aleatorio que no hacía distinciones, ya que permitía reproducir cualquier cosa de la biblioteca en cualquier momento. Era todo o nada, y me encantaba. Era la única salida donde toda la música de mi vida podía coexistir finalmente en un campo de juego parejo y sorprendente.
Con los servicios de música impulsados por IA de la actualidad, esta experiencia ecléctica y enriquecedora es más accesible que nunca. La IA puede seleccionar listas de reproducción que combinen música clásica y nueva con géneros populares, lo que ayuda a derribar las barreras entre ellos. Esta integración no solo presenta la música clásica a nuevos públicos, sino que también enriquece nuestra experiencia auditiva al ofrecer una combinación perfecta de toda la música que amamos. El futuro de la escucha musical es brillante, impulsado por la IA y listo para unir la música de nuestras vidas de formas sorprendentes y agradables.